La Postura - Sistema Propioceptivo

¿A que no hace falta que te mires los pies al dar cada paso? En cambio… ¿puedes asegurar que 'van rectos', bien paralelos entre sí?

La propiocepción hace referencia a la percepción que tenemos de nosotros mismos. Somos capaces de movernos, coger y hacer cosas sin necesidad de mirar el movimiento de cada parte de nuestro cuerpo. Y esto es gracias a una correcta propiocepción

El sistema propioceptivo y el sistema vestibular (recordemos: ¡el oído!) están muy relacionados. Gracias al trabajo conjunto de ambos conseguimos hacer cosas tan complejas como coordinar los dos lados del cuerpo o mantener la cabeza erguida.

Reflejos

Nuestros pies sabrán dónde ponerse y las manos sabrán qué hacer si nos encontramos con que tenemos que esquivar o capturar un objeto que nos lanzan. O si tenemos que sujetar o evitar la caída de algo a nuestro lado.

Todo esto son tareas de nuestros reflejos. Si estos sistemas están apunto, nuestros reflejos funcionarán a la perfección.

¿Y si nuestra propiocepción falla?

¿Qué ocurre si nuestra propiocepción falla? ¿Qué ocurre si la relación entre estos dos sistemas no funciona correctamente?

Por ejemplo, si nos encontramos con un escalón de bajada que no nos esperábamos, nuestra caída será irremediable si nuestros sistemas no funcionan bien. En cambio, en perfecto funcionamiento, simplemente nos llevaremos un buen susto, pero no nos caeremos puesto que el siguiente paso conseguirá equilibrar todo el cuerpo.

¿Están nuestros pies rectos?

También podremos concluir que nuestra posición y nuestra postura, dependerán en gran medida de nuestra propiocepción. 

Nos sorprenderíamos al ver nuestra postura fotografiada. Cuando pensamos que la cabeza está erguida y recta, o que los pies están en paralelo, en realidad ¡no es cómo percibíamos!.

La Postura - Sistema vestibular

¿Una bajada de tensión?... será que me estoy alimentando mal.
¿Un mareo?... será que tengo algún problema en las cervicales.
¿Ansiedad, incluso angustia?... será que tengo mucho estrés.


¡Y quizá estemos equivocados!
Sorprendentemente, síntomas como: vértigos, mareos, angustia, desorientación, visión borrosa, desfallecimiento, hipotensión, etc. Podrían ser consecuencias de un mal funcionamiento del sistema vestibular, es decir, ¡el oído!

Este sistema se encarga de las siguientes tareas:

• Informa de cómo está la cabeza en el espacio, es decir, identifica la orientación espacial, logrando así un equilibrio del cuerpo, tanto en reposo como en movimiento.
• Capta la aceleración lineal y angular, así como la intensidad, la dirección y duración de los movimientos. Es capaz de definirlo tanto para cada individuo, como para los objetos que nos rodean.
• Se encarga de la coordinación de movimientos oculares, 
• Mantiene el tono muscular y la postura. 

Si vienes por don Sancho 3-1º, podremos analizar si tus problemas de ansiedad, desorientación, hipotensión, etc, tienen su origen en este sistema vestibular.